Imaginamos Pasaje Santa Ana

El Ayuntamiento de Lleida inició el miércoles 11 de diciembre del 2024 el proceso participativo Imaginem el Pasaje de Santa Anna con una visita en este espacio para dar a conocer las características técnicas y qué son sus posibles usos. Más de unas cuarenta personas han participado en la visita por saber las posibilidades que presenta este entorno. La regidora del barrio 07 Instituts-Sant Ignasi i Templers-Escorxador, Pilar Bosch, va presentado el inicio del proceso participativo, en un encuentro en que también asistieron asistido regidores y regidoras de varios grupos municipales.

Bosch ha destacado que el objetivo de la iniciativa es “que no sea un proyecto hecho desde un despacho y que todo el mundo pueda opinar sobre el futuro del espacio, dentro de unos límites del que se puede hacer y el que no”.

El pasaje de Santa Anna está emplazado en el barrio del Matadero, en la calle de Lluís Companys, 4-6. Se parte de un espacio donde hay dos terrenos más el pasaje, que según el catastro, ocupan una superficie total de 1.385 m². Una de las parcelas está calificado de Equipación Comunitaria y, por lo tanto, destinado a servicios públicos para la ciudadanía, y el otro está calificado de zona verde y jardín, reservado para espacios libres, prioritariamente arbolados o ajardinados. Entre las dos fincas, hay una calle que da acceso desde la calle de Lluís Companys hasta el interior de la isla de casas, que es uno de los aspectos que da complejidad a este proyecto. Este acceso es el que mujer a aparcamientos particulares y otras propiedades privadas.

El actual Plan de Ordenación Urbana prevé que el solo urbano consolidado, contemplado como sistema de equipación comunitaria admite varios usos, como el educativo, el sociocultural, el deportivo, el sanitario y asistencial, el residencial especial, el público - administrativo, el religioso (culto) y el cementerio - funerario.

La propuesta que surja del proceso tiene que respetar y garantizar el acceso a las propiedades privadas vecinas y la entrada y la salida de vehículos a los varios inmuebles, a través del pasaje bajo los edificios de la calle de Lluís Companys. Se tiene que tener en cuenta que la construcción que había en este espacio, y que se encontraba en mal sido, se derrocó y se niveló el terreno.

Durante la visita, un equipo técnico municipal explicó cómo se desarrollará el proceso participativo, que constará de tres fases. Después de formar un grupo motor y de la visita para hacer un primer mapeo del entorno, esta se repetirá con varios grupos objetivo del barrio. Este proceso se abre al conjunto de la ciudadanía, pero toma especial incidencia la implicación de los colectivos y vecinos/se implicados directamente en este espacio. A continuación, se analizarán las necesidades y se recogerán propuestas para definir el proyecto, con el máximo consenso. El propósito principal es vincular la ciudadanía en este proyecto, especialmente los vecinos y vecinas que hacen uso de este entorno, porque se pueda elaborar conjuntamente el proyecto final de la reurbanización del pasaje.